La felicidad es uno de los sentimientos más lindos y deseados que se quiere tener a lo largo de nuestra vida, es un estado de ánimo que se produce en la persona cuando cree haber alcanzado una meta deseada y buena. El cual trae consigo paz interior y al mismo tiempo estimula a conquistar nuevas metas.
Qué bueno y satisfaciente seria estar todos los días alegres, pero por cosas de la vida es un poco difícil mantener este sentimiento que se ve consumido por el estrés y la preocupación de las responsabilidades y problemas sin resolver.
Qué bueno y satisfaciente seria estar todos los días alegres, pero por cosas de la vida es un poco difícil mantener este sentimiento que se ve consumido por el estrés y la preocupación de las responsabilidades y problemas sin resolver. 
La mayoría de los niños pueden mantener un nivel de felicidad más elevados que los adultos, gracias a que no tienen preocupaciones de nada salvo de divertirse y pasar un rato agradable, a demás de tener la facilidad de olvidar y distraerse rápido. Pero dicen que nunca se debe de dejar de tener algo niño.
Es difícil de relajarnos en esta época que todo corre y que nada para a esperarnos si nos detenemos, por eso casi siempre tenemos que estar paliando contra el reloj. Tampoco no todo es malo cuando se es adulto, también se tiene sus momentos de paz y alegría, un adulto también puede ser feliz si quiere. Por eso es bueno despertarse todos los días con la idea de que este será mejor de lo que fue ayer, saludar a Dios por todo lo que nos brinda y por todo lo que tenemos, darle gracias por nuestra salud y por tener junto a nosotros a nuestros seres queridos.
Lo mismo pasa en el trabajo o en el ambiente de estudio, es bueno mantener una sonrisa y bañarnos de aceite para que todo nos resbale de tal forma que nada pueda afectarnos de manera importante. Quien va querer estar con una persona que solo habla de sus problemas y se queja, o siempre para con cara de que todo le apesta. No es fácil encontrar la felicidad pero tampoco no es bueno querer buscarla con ansias o querer capturarla, la felicidad es algo parecido a la arena cuanto más la apreste en tu mano mas se saldrá de ella, pero si la sujetas suavemente veraz que se mantiene más tiempo en ella.
Lo que es interesante saber es que ocupamos el puesto número 73 en el ranking de los países más felices del mundo, esta noticia fue publicada por Perú 21 el viernes 28 de Enero del presente año, donde el primer lugar está ocupado por Noruega, seguida por Dinamarca y Finlandia.
Este ranking de felicidad fue realizado por parte de un estudio realizado por el Instituto Legatum de Londres, que –a base del ‘índice de prosperidad’– clasificó a 110 países, cubriendo el 90% de la población mundial. Cada nación se clasifica en 89 variables clasificadas en ocho apartados: la economía, el espíritu empresarial, el gobierno, la educación, la salud, la seguridad, la libertad personal y el capital social.
El puesto número 73 el cual estamos ocupando actualmente se debe a que estamos en un nivel intermedio en los apartados, pero se un nivel muy bajo en lo que es salud y capital humano, como se sabe poder alcanzar la felicidad no solo significa diversión, si no también tener una estabilidad en nuestra vida para poder mantenernos a nosotros mismos, nuestra familia o hijos.
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